"¡Sir Daniel! ¡Se ha quedado en los huesos!"
En el año 1998, SCE lanzó al mercado un título original, diferente y divertido, sobre todo muy divertido. Zarok, todopoderoso mago experto en nigromancia fue desterrado de Gallowmere hace un siglo por practicar artes oscuras. Un siglo después, en el año 1286, el malvado hechicero, secundado por un ejercito de muertos vivientes y seres del averno, se propone asediar Gallowmere para reducirlo a cenizas. Sin embargo, el Ejército Real, comandado por Sir Daniel Fortesque, consigue abortar el ataque y expulsar a Zarok del reino, aunque el valeroso capitán del ejército del Rey Peregrino muere en el transcurso de la batalla. Para ser recordado por todos y que su heroicidad no caiga en el olvido, es enterrado en una cripta del cementerio de Gallowmere.
Y ahora, en el 1386, 100 años después de la muerte de Fortesque, Zarok vuelve a Gallowmere con el fin de terminar lo que hace 2 siglos comenzó, sabiendo que Sir Daniel está muerto y nadie puede detenerle. Para lograrlo, hechiza a todos los habitantes del pequeño pueblo inglés privándoles de su voluntad y consigue despertar a todos los muertos de sus tumbas, lo que provoca que Sir Daniel vuelva a la vida (algo mas delgado, eso sí) para, de una vez por todas, acabar con las huestes de Zarok y librar al reino de Gallowmere de su manto de tinieblas.
Aquí comienza uno de los juegos mas originales y divertidos del catálogo de PSOne y que recuerdo con especial cariño. Lo que pudiera parecer un festival macabro de zombies y sangre (al mas puro estilo Resident Evil) se convierte en una especie de mezcla entre "La Familia Adams "y "Pesadilla Antes de Navidad "con algo mas de acción. Con un estilo visual muy colorista y unos diseños muy divertidos (la "cara" de Sir Daniel es genial), tenemos que ir superando una serie de niveles, con un control simple pero muy completo, que nos permite atacar, defendernos, saltar... (acciones típicas de un juego de aventuras) hasta llegar a Zarok y acabar con él.
Gráficamente el juego luce sensacional, dando la sensación de estar dentro de una película de animación por su paleta de colores y el diseño de sus personajes, algo deformes o caricaturizados. Si es cierto que el juego adolece de algo de clipping (el personaje puede "atravesar" temporalemente paredes o el suelo) pero la PSOne trabajaba a pleno rendimiento con este juego. El diseño de enemigos es variado y los jefes finales, así como los héroes, tienen un acabado genial.
En cuanto al sonido, las melodías son de un estilo medieval-gótico muy interesante que acompañan muy bien a las acciones del juego. Las voces son en perfecto inglés sin posibilidad de cambiarlo al español pero, a nada que tengas un nivel medianamente decente, se puede seguir la historia perfectamente.
En definitiva, Medievil es uno de esos clásicos de la historia del videojuego. Una historia que cualquier jugador que se precie debe conocer y haber jugado al menos una vez. Y esque no sabras lo que es reirte de la muerte hasta que veas la mano verde de un zombi correteando a tu lado mientras intentas salir del cementerio en el que has pasado 100 años durmiendo.
Aquí teneis un par de enlaces, uno con el opening y otro con escenas ingame: Opening Medievil Escenas Ingame Medievil.
PD: Esta crítica va dedicada a mi amigo Jesús Benabat, amante de la saga Medievil.
PD: Esta crítica va dedicada a mi amigo Jesús Benabat, amante de la saga Medievil.
Sí señor! Un videojuego de aventuras de toda la vida, y encima con dosis de fantasía que te invitaban a soñar...con muertos claro.
ResponderEliminarMágnifico trabajo de recuperación de estas joyas de consola.